Cada 25 de agosto, Paraguay celebra el Día del Idioma Guaraní, una fecha que conmemora un momento histórico crucial: la promulgación de la Constitución Nacional en 1967, cuando por primera vez en la historia del país, el idioma guaraní fue reconocido oficialmente al ser elevada a la categoría de lengua nacional, otorgándosele un rango jurídico que reafirma su importancia en la vida cotidiana y cultural de los paraguayos.
Este reconocimiento legal no solo subraya la riqueza lingüística del país, sino que también refleja un compromiso con la preservación y promoción de un idioma que, a lo largo de los siglos, ha resistido y prosperado a pesar de los desafíos.
La inclusión del guaraní en la Constitución Nacional de 1967 fue un paso significativo hacia la valorización de la identidad paraguaya, en un país donde más del 80% de la población habla guaraní, ya sea como lengua materna o en combinación con el español. Esta decisión fue una reivindicación del idioma como un pilar fundamental de la cultura y la historia del Paraguay, y un reconocimiento a la diversidad lingüística como parte esencial del patrimonio nacional.
Más tarde, la Constitución Nacional de Paraguay de 1992 oficializó el guaraní como lengua oficial del país, junto al castellano.
Hoy en día, el guaraní no solo se habla en las comunidades rurales, sino que también tiene una presencia creciente en los ámbitos urbanos, la educación, los medios de comunicación y la literatura, continuando así su legado como uno de los pocos idiomas indígenas que ha mantenido su vigencia en un contexto de globalización. El Día del Idioma Guaraní es una oportunidad para reflexionar sobre su valor, promover su uso y celebrar su rol como símbolo de la identidad paraguaya.
Fuente: El Nacional