Este sábado se realizó la lectura de la sentencia en el juicio oral que enfrenta el ex ministro del Interior, Walter Bower, donde fue hallado culpable por supuestas torturas contra agentes policiales, ante un intento de golpe contra el Gobierno de Luis Ángel González Macchi, en el año 2000. El Tribunal de Sentencia fijará las penas el próximo viernes.
Para el Tribunal de Sentencia quedó probada la reprochabilidad por el hecho punible de maltrato del ex ministro del interior, Walter Bower, y los dos ex policías Merardo Palacios y Osvaldo Vera.
El juicio oral que enfrenta el ex ministro y los dos ex policías fue postergado por cinco días. La diligencia judicial proseguirá el próximo viernes 25 de octubre, a las 12:00.
El Tribunal de Sentencia tomó la decisión de postergar la diligencia para retomar la sesión el próximo viernes y fijar las penas.
El Tribunal de Sentencia —conformado por Fabián Weisensee, Cándida Fleitas y Laura Ocampo— comenzó este sábado con la lectura de la sentencia y postergó su término para la preparación de las pruebas a ser valoradas para establecer la pena.
La lectura de la sentencia no tuvo público y solo participaron con las partes, debido a los incidentes registrados antes de la deliberación.
Para los jueces, en mayoría, existió el hecho y la participación de los acusados en el caso en el que son procesados.
“Para el Tribunal quedó acreditado el artículo 110, maltrato físico”, sostuvo Fleitas.
Esta es la segunda vez que se dilata la sentencia del ex ministro.
El caso
Los denunciantes son el oficial Jorge López y el comisario Alfredo Cáceres, quienes señalaron que fueron torturados durante los días en que fueron detenidos.
El hecho denunciado habría ocurrido entre el 18 y 19 de mayo del año 2.000, cuando policías acusados de un intento de un golpe de Estado contra el gobierno del entonces presidente Luis Ángel González Macchi fueron arrestados por sus mismos camaradas.
López y otros policías denunciaron ser torturados en la sede de la comisaría 11ª Metropolitana en la mañana del 19 de mayo.
En tanto, Cáceres corrió una suerte similar en otro sitio. Afirmó que policías lo torturaron el 21 de mayo de 2.000 en la sede de la Marina, bajo la atenta mirada de Walter Bower.
Los detenidos habían sido llevados a la sede de la comisaría 11ª, sitio que no era de la jurisdicción en donde ocurrió el hecho, aunque sí era estratégica porque estaba en las cercanías de la casa de Bower.
Fuente: Última Hora