Una festividad de origen celta pero con alcance mundial en el siglo XXI, es Halloween, también conocida como Noche de Brujas, la cual se celebra este martes 31 de octubre. ¿Cuál es el origen y significado de esta celebración?
La fiesta de Hallowen se celebra este 31 de octubre. Si bien es más popular en Estados Unidos, Canadá y algunos países europeos, los festejos en esta Noche de Brujas se replican en el mundo entero.
La palabra Halloween es la contracción de la expresión inglesa All Hallows’ Eve y cuyo significado es ‘víspera del Día de Todos los Santos’, según explica la Fundación del Español Urgente (FundéuRAE).
En ese sentido, el medio público estadounidense La Voz de América (VOA) señala que el antecedente de Halloween proviene de la cultura celta, donde se conocía como Samaín, que significa “fin del verano”.
El escritor y divulgador Javier Sierra explicó que este día marca el momento en que “las noches comienzan a alargarse y la oscuridad empieza a ganar terreno simbólicamente y en la naturaleza”.
Esta celebración indica el cambio de estación, la transición del clima cálido del verano a las temperaturas más frías del otoño e invierno en el hemisferio norte.
El 31 de octubre, los celtas tenían varias ceremonias relacionados con el retorno de los difuntos al mundo de los vivos. Este evento precedía a la festividad de Todos los Santos, celebrada el 1 de noviembre.
“Los celtas sentían que las tinieblas (de la noche) se cernían sobre el mundo y creían que los difuntos aprovechaban para venir al mundo de los vivos y llevarse consigo a las almas más vulnerables”, menciona Javier Sierra a VOA.
En el siglo VIII, el papa Gregorio III cambió la fecha de la festividad de Todos los Santos al 1 de noviembre, ya que hasta entonces se conmemoraba en mayo.
El origen de los disfraces y las calabazas
Con respecto a los disfraces, algo característico en Halloween, el medio de Estados Uniodos rememora el rol de los druidas en la cultura celta. Se trata de los miembros de la clase sacerdotal en las áreas celtas de Europa, como Gran Bretaña, Irlanda, el norte de España, la Galia (Francia y el norte de Italia).
Según registros históricos, los druidas fueron quienes introdujeron la tradición de disfrazarse con motivos relacionados con los espíritus.
“Los druidas, que existieron antes del cristianismo, proponían disfrazarse de espíritu como forma de engañar a aquellos espíritus que aprovechaban las tinieblas para llevarse almas. Pensaban que si te disfrazabas así, pasabas desapercibido para la parca”, afirma Sierra.
La migración de población de Irlanda a Estados Unidos en el siglo XIX, por la Gran Hambruna de 1845, hizo que esta fiesta comenzara a popularizarse en Norteamérica.
Sobre las calabazas iluminadas con velas, también características en esta celebración, la misma publicación señala que esto se conoce como Jack-o’-lantern, que se traduce como Jack, el de la linterna.
La leyenda popular cuenta que un hombre llamado Jack engañó al diablo y quedó en una suerte de limbo entre el cielo y el infierno. Ante esta situación, el diablo, conmovido, le arrojó un carbón encendido para iluminar su camino.
Este es el motivo de las calabazas con vela en su interior: un gesto simbólico para guiar a las almas perdidas que se cree que están a nuestro alrededor.
Con respecto a la tradición de pedir dulces con la frase de “dulce o truco”, CNN en Español señala que esto comenzó en áreas del Reino Unido e Irlanda. La gente iba de casa en casa haciendo “souling” —pidiendo panes pequeños llamados “pasteles del alma»— a cambio de una oración, indica el medio.
Fuente: Última Hora