El jefe de Investigación de la Policía Nacional, César Diarte, descartó totalmente que la causa del enfrentamiento entre barras de Cerro Porteño fuera por una pancarta alusiva al clan Rotela, como lo había informado el ministro de Justicia, Ángel Barchini.
El comisario César Diarte, jefe de Investigaciones de la Policía Nacional, confirmó que la batalla campal entre las facciones La Plaza y Comando, barras bravas de Cerro Porteño, no fue por una pancarta alusiva al clan Rotela, grupo dedicado al microtráfico de drogas.
“Nosotros recibimos la grabación de más de cuatro horas del circuito del estadio a consecuencia de que una persona determinada dijo que los desmanes habían ocurrido porque se alzó una pancarta alusiva al clan Rotela y tal cosa no ocurrió”, afirmó.
Así desmintió lo que había informado el ministro de Justicia, Ángel Barchini.
Barchini había expresado que “un sector quería abrir una pancarta que tenía preparada para decir ‘Javier Rotela, estamos contigo’ y el otro sector no quería. Ese fue el origen de la pelea”.
En ese sentido, el jefe de Investigaciones de la Policía reveló qué fue lo que desencadenó el enfrentamiento entre los simpatizantes azulgranas.
Un sector de Comando es del barrio Roberto L. Petit, mientras que una parte de La Plaza es de la Chacarita.
“El problema fue cuando empezaron a realizar estrofas de: ‘Chacarita sos cagón’ y ahí empieza la trifulca”, confirmó tras la desgravación de los videos.
A partir del análisis pudieron identificar a cada uno de los que protagonizaron el episodio de violencia en el estadio Defensores del Chaco, especialmente a los cabecillas.
Nueve ya cuentan con órdenes de detención y pedirán que el Ministerio Público libre más órdenes contra alrededor de 100 personas identificadas.
La disputa entre ambos grupos organizados es por diferentes cuestiones, entre ellas por el territorio.
Tienen prohibición de ingresar a estadios
De todas las personas que la Policía Nacional ya tiene identificadas, detectaron que una gran mayoría tiene prohibido ingresar a los estadios donde se disputen encuentros deportivos, sobre todo si juega Cerro Porteño en La Nueva Olla.
“El 70% de esas personas cuentan con prohibiciones para ingresar a los estadios, especialmente cuando Cerro juega en su estadio”, informó.
Explicó que, como medida impuesta por la Justicia, deben ir hasta la comisaría de su barrio una hora antes del inicio del partido y retirarse una hora después de la finalización del encuentro.
Además, señaló que también cuentan con antecedentes por perturbación pública en encuentros deportivos, no solo entre barras, sino también por problemas con barras de otros clubes.
Al ser consultado cómo consiguen las entradas para ingresar, el comisario contó que manejan el rumor de que gente cercana al club les entrega las entradas.
“No es que sacan de su bolsillo y compran (la entrada), más o menos es por gentileza de determinadas personas”, subrayó.
El comisario indicó que el trabajo de la Policía Nacional es más bien de acompañamiento como medida de seguridad, por lo que apuntó que sería ideal pedir la cédula de identidad para el ingreso a la cancha.
No obstante, dijo que van a ajustar más los controles en los lugares donde las barras bravas se juntan para ir a la cancha y luego en la salida.
También reveló que cuando detienen a los jóvenes, detectan que “sí o sí pertenecen a una barra de algún club, ya sea de Cerro, Olimpia u otro club”.
¿Cuál es el mayor problema para erradicar la violencia?
“Los menores”, respondió el jefe de Investigaciones al ser consultado sobre cuál es la mayor dificultad con la que se encuentra.
“La ley los protege mucho. Ocurren desmanes y ni sus identificaciones podemos pasar. Se les agarra, se les vuelve a soltar, se les tiene que alimentar en desayuno, almuerzo, cena”, acotó.
La mayoría tiene problemas con las drogas, de acuerdo con el comisario.
Fuente: Última Hora