Fluminense terminó siendo demasiado para Olimpia, que lo buscó hasta el final y con sus armas en el Defensores del Chaco, pero no le alcanzó para superar a un equipo de muchísima técnica y que supo manejar el resultado.
Como se preveía, Olimpia fue de arranque un equipo completamente distinto al del juego de ida y con empuje inquietó a Fluminense, mostrando que la remontada era posible, pero estuvo siempre expuesto al gran despliegue futbolístico del rival, que no perdonó.
John Kennedy marcó el primero del partido en una salida rápida, comenzando a encaminar la clasificación de los brasileños.
Pero Olimpia no mostró señales de rendirse, como en toda la serie, y con la misma fórmula: empuje, fuerza y apoyo del estadio, llegó al empate en el juego de esta noche y el descuento lo hizo Facundo Zabala con una jugada personal desde izquierda hacia al medio.
La pequeña posibilidad que aún estaba latente hizo que Olimpia muestre la misma actitud de arranque en la complementaria y salvo un momento de real peligro, en donde incomodó a Fábio y el resto de la defensa del «Flu», pasaron los minutos y el gol no llegaba hasta que todo se derrumbó con la expulsión de Fernando Cardozo.
Y ya en ese contexto, llegó el segundo y tercero de Fluminense por parte de Germán Cano, el letal goleador que no podía faltar al festejo del «tricolor carioca».
La calidad técnica e idea futbolística irrenunciable, que la aplica hasta en los momentos menos esperados, con el balón al pie y siempre tomando riesgos con la posesión del balón, Fluminense encontró el camino.
El mejor momento del partido para Olimpia fue durante un tramo de minutos del segundo tiempo, donde empezó a cargar y meter pelotas contra el área rival, pero coincidentemente, Francisco Arce decidió prescindir de Facundo Bruera en ese momento y perdió fuerza por esa vía.
Posteriormente, la expulsión de Cardozo fue lo que terminó por inclinar definitivamente la balanza a favor de los brasileños, porque a pesar del deseo de seguir buscando ya no había forma para Olimpia, que ahora ya no puede pelear por el sueño principal y vuelve a la difícil realidad del plano local, en donde también necesita una remontada importante, si es que quiere seguir compitiendo internacionalmente el año que viene.
Fuente: Versus